Areco’s charms: Rainy day, a chilly wind starts blowing provides a welcome relief after a grueling week. Dark clouds cover sky, the day almost becomes night; then some timid drops begin to drop. The temperature continues to fall, and it is a pleasure to open windows wide for that refreshing breeze to flood the warm environments. … The sound of rain drops hitting a million ceilings is an incomparable orchestra. Plants and flowers breathe relieved and drink tasty water provided by the sky. After a while, the rain stops, the feeling of freshness and the smell of damp earth and wet grass invades every corner. In the yard the green grass looks alive, punctuated by drops that reflect the light of a gray day.The rain in San Antonio de Areco has a special meaning. Several of the neighbors seem to wait for the rain to go knock on a door. The phone also sounds. The order is the same, everyone knows that a rainy day is synonymous of fried cakes or “tortas fritas”. It’s a habit, it is impossible to deter them. The options are many, cookies, invoices, cakes, but the first thing everyone asks are fried cakes.
UN DIA GRIS EN ARECO: TORTAS FRITAS Y SUS SECRETOS
Día lluvioso, comienza soplando un viento fresquito que brinda un muy esperado alivio después de una semana agotadora. Las nubes oscuras cubren el cielo, el día se apaga y casi que se hace noche; luego comienzan a caer algunas tímidas gotas. La temperatura sigue descendiendo, y es un placer abrir ventanas de par en par para que esa brisa renovadora inunde los cálidos ambientes. Llueve…El sonido de millones de gotas golpeando los techos es una orquesta incomparable. Las plantas y flores respiran aliviadas y beben gustosas las aguas que brinda el cielo. Luego de un tiempo, lentamente se detiene el golpeteo, la sensación de frescura y el olor a la tierra húmeda y la hierba mojada invade cada rincón. En el patio todo el verde se ve más vivo, salpicado por gotas que reflejan la luz de un día gris.
La lluvia por estos lados tiene un significado especial. Varios de los vecinos parece que esperaran la lluvia para ir a golpear una puerta. El teléfono también suena. El pedido es el mismo, todos saben que un día de lluvia es sinónimo de tortas fritas. Ya es una costumbre, es imposible disuadirlos. Las opciones son muchas, masitas, facturas, tortas, pero lo primero que todos piden son tortas fritas.